¿QUÉ ES UN CHALAZIÓN Y CÓMO SE TRATA?

El chalazión provoca una inflamación en los párpados que, muchas veces, se confunde con los orzuelos. Sin embargo, contrariamente a estos, el chalazión es un proceso crónico, por lo que aparecerá de forma recurrente, aunque no haya ninguna infección. No obstante, comprender las causas por las que aumentará la frecuencia o no de esta afección ocular es crucial para poder adoptar medidas de prevención eficaces.

Debido a que esta es una afección ocular común que apenas se conoce, conviene comprender sus síntomas y los tratamientos que hay disponibles para tratar esta condición óptica con éxito. De esta manera, se evitará la sintomatología que desencadena y que afecta a la vida diaria de una persona de forma muy importante.

Conoce el significado de chalazión

Como hemos mencionado, el chalazión es una inflamación que se produce en los párpados. Lo que detectan los pacientes suele ser un bulto o una protuberancia que provoca una inflamación en la zona, generando molestias y, en algunos casos, la imposibilidad de abrir bien el ojo. Uno de los principales motivos por los que aparece el chalazión se debe a la inflamación de las glándulas de Meibomio cuando sus conductos se bloquean. En el momento en el que esto sucede, surge el bulto característico del chalazión.

Esta protuberancia suele ser firme al tacto, pero bastante incómoda y dolorosa. Aunque, a veces, desaparece sin tratamiento —al cabo de cuatro semanas—, hay pacientes que notan cómo el bulto continúa creciendo, lo que aumentará las molestias y sensibilidad en la zona.

Si bien el chalazión se suele confundir con un orzuelo, conviene dejar claro que hay ocasiones en las que el orzuelo provoca la aparición del chalazión. Sin embargo, el orzuelo es un bulto que, a veces, contiene pus, mientras que en el caso del chalazión la protuberancia que aparece se debe a que el líquido de las glándulas de Meibomio no se está drenando. En cuanto esto se resuelva, el bulto desaparecerá.

Causas y síntomas del chalazión

Una de las principales causas del chalazión es la obstrucción de las glándulas de Meibomio. Estas producen un líquido esencial que permite la lubricación del ojo. Sin embargo, a veces los conductos se pueden obstruir, ya sea porque se produce demasiado líquido, porque el ojo no está limpio, etc. Cuando esto sucede, las glándulas no drenan el líquido y aparece la protuberancia característica del chalazión.

Otra de las causas que pueden propiciar la aparición de esta afección ocular son las alergias. La primavera, por ejemplo, es una estación en la que suele haber muchas personas que presentan los ojos rojos debido a las alergias que les provoca el polen. Debido a esto, las glándulas de Meibomio pueden segregar mucho más líquido lubricante del habitual, lo que acabará provocando su obstrucción, si no se toman medidas.

También la rosácea, una enfermedad crónica de la piel puede hacer que sea más frecuente que aparezca el chalazión. Además del enrojecimiento de la piel, se puede producir enrojecimiento y ardor en los ojos, así como la obstrucción de las glándulas de Meibomio. Cuando esto ocurre, estamos ante lo que se conoce como rosácea ocular, de la que se conoce muy poco y que tiene esta consecuencia tan característica.

Una de las últimas causas del chalazión puede ser las infecciones bacterianas debido a conjuntivitis, blefaritis, etc. Esto también puede provocar la obstrucción de las glándulas de Meibomio y generar síntomas tan molestos como los siguientes:

• Párpados inflamados y enrojecidos.
• Presencia de una protuberancia en los párpados.
• Sensación de malestar en los ojos.
• Visión borrosa.
• Síntomas de tener los ojos secos.
• Sensibilidad en la zona.

Opciones de tratamiento

El tratamiento del chalazión dependerá del agente que lo haya causado. Por ejemplo, si hay una infección bacteriana, habrá que recurrir a medicamentos antibióticos que permitan combatir la infección de manera exitosa. Esta será la única forma de poder combatir todos los síntomas que está provocando el chalazión en los párpados, puesto que las bacterias solamente pueden desaparecer gracias al empleo de estos fármacos.

Otros tratamientos suelen comprender la aplicación de calor local en la zona de los ojos afectada. Así, lo que se pretende conseguir es que la protuberancia se vuelva un poco más blanda y que las glándulas de Meibomio puedan drenarse. Puesto que es su obstrucción los que está generando toda la sintomatología antes expuesta.

La limpieza del párpado, de manera suave, también es una excelente opción. Y es que la suciedad acumulada, el exceso de grasa o el tocarse demasiado los ojos con las manos sucias pueden acabar provocando que aparezca esta afección ocular. Para evitarlo —tanto cuando el chalazión ya ha aparecido como si no—, se pueden usar toallitas de uso dual (una opción médica) que permita la curación de la zona para que el chalazión desaparezca.

Consejos para prevenir y evitar el chalazión

Como mencionamos al principio, el chalazión es un proceso crónico, por lo que a lo largo de la vida de una persona habrá varias ocasiones en las que esta afección aparecerá. Para evitar que esto se produzca con mucha frecuencia, existen algunos consejos que pueden ser útiles. Aquí compartimos algunas recomendaciones:

• Aplicar compresas calientes de manera regular:

Aunque no haya ningún bulto ni protuberancia que indique que las glándulas de Meibomio están obstruidas, la aplicación de compresas calientes permitirá mantener los conductos abiertos y libres de cualquier grasa que pueda bloquearlos y provocar el chalazión.

• Mantener una buena higiene ocular:

Con toallitas específicamente diseñadas para poder usarlas con seguridad siempre que sea necesario o utilizando toallas que estén limpias al lavarse la cara por las mañanas. Esto, aunque no lo parezca, marcará la diferencia para prevenir el chalazión.

• Evitar el frotamiento excesivo de los ojos:

Aunque aquí también es importante mencionar que hay que tener cuidado con frotarlos con las manos sucias. Si esta es una manía, conviene prestarle la debida atención para prevenir la aparición de protuberancias en los ojos con una frecuencia mayor a la habitual.

La opción de las toallitas de limpieza diaria para llevar siempre encima son una excelente opción. Estas toallitas te ayudan a mantener limpia la zona del ojo. Además, en el caso de tener ya un chalazión, estas toallitas refrescan, hidratan y calman la zona, generando mucho confort.

Te recomendamos leer información sobre cómo cuidar de tus ojos, ya que seguir una buena rutina de limpieza te evitará la aparición de problemas oculares en el futuro.

Además de todos los consejos mencionados para prevenir el chalazión, es importante siempre seguir las recomendaciones de un profesional de la salud. Este será el que analizará cada caso en particular para ver cuál es el posible problema que está desencadenando el chalazión, cómo abordarlo de la mejor forma y en qué periodos hay más recurrencias. De esta manera, se realizará un abordaje adecuado de esta afección.